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Por Dra. Venus Ramos, doctora en medicina
Por la Dra. Venus Ramos
Aunque la mejor fuente de nutrientes esenciales es una dieta sana y equilibrada, no siempre es fácil para las mujeres comer la cantidad adecuada de frutas, vegetales, granos enteros y grasas saludables todos los días. No es de extrañar que tantas mujeres decidan tomar suplementos para la salud.
En función de su dieta, estilo de vida, rutina y etapa de la vida, algunos suplementos tendrán ventajas distintas sobre otros. Sin embargo, hay algunos que se destacan como prioridades para ayudar a que el cuerpo de una mujer funcione de manera óptima.
La vitamina D contribuye con varias funciones corporales, desde huesos fuertes hasta un sistema inmunológico sano. Sin embargo, es probable que uno de los efectos más importantes de la vitamina D para las mujeres sea en la función cardiovascular. Las investigaciones han descubierto que las personas que tienen bajos niveles de vitamina D en la sangre son más propensas a tener apoplejías, ataques cardíacos, insuficiencia cardíaca o presión arterial alta más adelante en la vida. Para las mujeres embarazadas, los bajos niveles de vitamina D se asocian con preeclampsia y otros resultados desfavorables. Se observa una asociación similar entre un bajo nivel de vitamina D y el desarrollo de diabetes.
Su cuerpo puede producir la vitamina D adecuada si su piel está expuesta a suficiente luz solar, específicamente a los rayos ultravioleta B (UVB). Sin embargo, en un estudio se descubrió que el 36 % de los adolescentes sanos y el 57 % de los adultos en Estados Unidos tenían niveles insuficientes de vitamina D.
No es fácil mantener suficientes niveles de vitamina D al tener en cuenta nuestra dieta y estilo de vida modernos. Hoy en día, mucha gente pasa menos horas al aire libre. En áreas urbanas y contaminadas, la luz UVB se filtra, por lo que aunque esté expuesto al sol, es posible que su piel no reciba suficiente luz UVB. Además, para protegerse contra el cáncer de piel, solemos aplicarnos protector solar cada vez que nos exponemos al sol. Cuando se aplica correctamente, el protector solar reduce nuestra capacidad de absorber la vitamina D en más de un 90 %.
Otros factores que pueden contribuir a la deficiencia de vitamina D son la obesidad, el color oscuro de la piel y los problemas para absorber la grasa (por ejemplo, el gluten, las infecciones o las toxinas podrían estar causando un problema intestinal como el “intestino permeable”).
Exponerse al sol durante 20 minutos todos los días, si no está usando bloqueador solar o no tiene un color de piel oscuro, puede ayudar a su cuerpo a producir suficiente vitamina D. También puede obtener vitamina D a partir de las yemas de huevo, los pescados grasos (como el salmón) y la carne de los órganos (como el hígado de res). Además, el cereal y la leche para el desayuno con frecuencia se fortifican de forma artificial con vitamina D.
La Sociedad Endocrina, una organización líder en investigación endocrina, recomienda un nivel de vitamina D en la sangre de 30 ng/mL como mínimo y, si los niveles están por debajo de ese nivel, un suplemento diario de 1500 a 2000 UI. Debido a las deficiencias generalizadas, es aconsejable pedirle a su médico que revise su nivel de 25-hidroxivitamina D, para que sepa cuánta vitamina D debe tomar en realidad.
Aunque existen cinco tipos de vitamina D, el cuerpo utiliza principalmente la vitamina D2 (también llamada ergocalciferol) y la vitamina D3 (colecalciferol). El cuerpo debe primero transformar ambas formas de la vitamina para que sean absorbidas. Debido a que la vitamina D3 se somete a este proceso de forma más rápida y eficaz que la vitamina D2, es la variante preferida.
California Gold Nutrition ofrece gomitas de vitamina D3, que son orgánicas y vegetarianas. Vienen en un tamaño de porción conveniente para dosificar con 2 gomitas que proporcionan 2000 IU.
La curcumina es reconocida por sus poderosas propiedades antiinflamatorias. Esto es de particular interés para las mujeres porque a medida que sus niveles de estrógeno disminuyen con el envejecimiento, son más susceptibles a los problemas que se deben a la inflamación. La inflamación crónica se asocia con enfermedades como el cáncer, la diabetes, la artritis, las enfermedades cardíacas, la osteoporosis y el Alzheimer.
La curcumina es un componente de la especia conocida como cúrcuma. Sin embargo, el contenido de curcumina presente en la cúrcuma es de solo un 3 % de su peso. Por lo tanto, es difícil lograr niveles efectivos de antiinflamatorios simplemente al añadir cúrcuma a los alimentos. Además, la curcumina es absorbida de forma deficiente en el torrente sanguíneo cuando se consume sola. Sin embargo, consumir curcumina con piperina (una sustancia que se encuentra en la pimienta negra) mejora enormemente su absorción.
Para una efectividad óptima, busque productos de curcumina que incluyan piperina, como el complejo de curcumina C3 de California Gold Nutrition.
El aceite de pescado es una potente fuente de ácidos grasos omega 3, que también puede reducir la inflamación. Los omega 3 también se asocian con una mejora en el estado de ánimo, la memoria y una disminución de los riesgos de depresión y demencia. Las investigaciones han demostrado todos estos beneficios con dos tipos específicos de omega 3: EPA y DHA.
Con respecto a la ingesta de omega 3, es mejor optar por suplementos de aceite de pescado en lugar de consumir cantidades adecuadas de pescado, debido a la preocupación por el contenido de mercurio en este último. Al elegir un aceite de pescado, asegúrese de optar por fuentes de pescado que se hayan sometido a prueba y que se haya demostrado que están libres de mercurio y otros componentes tóxicos. El producto Omega 800 de California Gold Nutrition contiene EPA y DHA, y utiliza exclusivamente un concentrado de aceite de pescado que ha obtenido la codiciada clasificación de 5 estrellas de los estándares internacionales de aceite de pescado por su calidad, seguridad y potencia.
