En esta época del año todo el mundo quiere salir afuera. Se disfruta tanto tomar el cálido sol sobre la piel. Si no has oído que exponerte al sol, sin protegerte con protector solar, te sitúa en riesgo de arrugas, en el mejor caso, y cáncer de piel, si pensamos en lo peor, entonces ¡probablemente has vivido debado de una roca! 

Sin embargo, aunque la mayoría de la gente es consciente de los peligros de tomar demasiado sol, muchos no se dan cuenta de que la luz del sol también posee enormes beneficios para la salud. Teniendo en cuenta que necesitas proteger tu piel con un protector solar de alta calidad cuando sales al exterior, examinemos algunas de las sorprendentes ventajas de la luz solar. 

1. La luz solar y la prevención del cáncer

No solo las plantas metabolizan la luz del sol. Los humanos también lo hacen. Mediante un proceso complejo, nuestros cuerpos transforman la luz del sol en la vital vitamina D. La conexión entre la deficiencia de vitamina D y el cáncer fue realizada por primera vez por los doctores  Frank y Cedric Garland de la Universidad de California, San Diego. Tras darse cuenta de que la incidencia del cáncer de colon era casi tres veces mayor en Nueva York que en Nuevo México, los hermanos Garland lanzaron la hipótesis de que la falta de exposición solar, que provocaba una deficiencia en vitamina D era un factor de ello. Las investigaciones indican ahora que tener deficiencia de vitamina D incrementa el riesgo de muchos cánceres, especialmente el de pecho y el de colon. Por ejemplo, un estudio de cuatro años controlado por placebo realizado a 1,179 mujeres postmenopáusicas concluyó que complementar con vitamina D producía una espectacular caída del 60 % en el riesgo de desarrollar cualquier tipo de cáncer. 

2. La luz solar y los pacientes de alzheimer

Las investigaciones clínicas han mostrado que la exposición a la luz de amplio espectro durante todo el día junto con la oscuridad por la noche puede ayudar a mejorar algunos aspectos de la enfermedad de alzheimer, como reducir la agitación, incrementar la eficiencia del sueño, disminuir el tiempo despierto por la noche y reducir la actividad nocturna de estos pacientes. 

3. La luz del sol y el riesgo de esclerosis múltiple

La multiesclerosis es más común en poblaciones que viven lejos del ecuador. Las personas que se mudan de una zona de bajo riesgo a una zona de alto riesgo antes de los 15 años tienen un mayor riesgo de desarrollar la enfermedad, mientras que aquellos que hacen lo mismo tras la adolescencia tienen un menor riesgo. Estas observaciones sugieren que la exposición medioambiental, y en especial, la exposición temprana a la luz del sol (que está relacionado con los niveles de vitamina D) en las dos primeras décadas de vida, influye en el riesgo de desarrollar esclerosis múltiple. Relacionado con este resultado, varios estudios sobre la población europea observaron que hay un menor riesgo de esclerosis múltiple en nacimientos en los meses posteriores a octubre y un mayor riesgo de la enfermedad en nacimientos de después de mayo. Esto sugiere que los niveles maternos de vitamina D durante el tercer trimestre de embarazo pueden influir en el riesgo de esclerosis múltiple. 

4. La luz solar y la psoriasis 

La exposición a la luz solar es extremadamente beneficiosa para individuos con psoriasis. En un estudio, una terapia de tomar el sol en exteriores durante cuatro semanas demostró promover una disminución significativa de los síntomas de la psoriasis en el 84 por ciento de los sujetos.

5. La luz del sol y la depresión leve 

Se ha investigado mucho sobre el vínculo entre la luz del sol y el estado de ánimo. Un gran estudio demostró que la luz solar incrementa de hecho los niveles de un antidepresivo natural de nuestro cerebro. En los días soleados, el cerebro produce más cantidad de serotonina química que nos anima en los días más oscuros. 

6. La luz solar y la salud ósea en los mayores 

Es bien conocido que la vitamina D estimula la absorción del calcio, el fortalecedor de los huesos. El proceso de fabricación de vitamina D comienza cuando la luz del sol cambia el 7-dehidrocolesterol de la piel en vitamina D3. Las investigaciones recientes muestran una relación directa entre la densidad ósea y los niveles sanguíneos de vitamina D3. Los mayores niveles sanguíneos de vitamina D3 se asocian con una menor tasa de facturas de todo tipo, prácticamente; los menores niveles de vitamina D3 en la sangre se asocian con una mayor proporción de fractura de todo tipo. 

7. La luz solar y la calidad del sueño

Cuando la luz del sol te da en los ojos, tus nervios ópticos envían un mensaje a la glándula cerebral que produce melatonina (una hormona que te ayuda a dormir); la glándula disminuye sus secreciones de melatonina hasta que el sol baje de nuevo. En otras palabras, la exposición a la luz del sol durante el día incrementa la producción natural de melatonina por la noche. Los bajos niveles de producción de melatonina se relacionan con una pobre calidad del sueño, especialmente en adultos jóvenes.